Disculpen la ausencia, tanto en mis blogs como en los suyos. Y es que ya lo dije, ¡¡no paro!! Entramos ya en la recta final y mis energías flaquean. Va a ser un fin de semana emotivo y agotador. Y, como remate final, el todo o nada.
Hacía tiempo que no hablaba de mi otra gran pasión, y es que el año no ha dado más de sí. Entre unas cosas y otras no he podido disfrutar todo lo que hubiera querido. Aunque en esta temporada, más que disfrutar, lo que hemos hecho es sufrir. Un año lleno de alegrías a medias y muchos sinsabores. Pepu, ¿qué pasó?
Una buena Demente lo lleva codificado en los genes, es lo que toca, es lo que hay. No es algo nuevo ni será la última vez.
Para colmo, Jiménez se va. Otro estandarte que se nos borra. Volveremos a reinventarnos…
Volveré con ustedes la semana que viene. ¿El día? Pues depende mucho de mi humor y de lo que pase el domingo… Crucen los dedos por mí (a menos que sean murcianos, pero no me lo cuenten).
¡¡ARRIBA ESE ESTU!! ¡¡EL ÚLTIMO EMPUJÓN!!
Puesno sé para qué necesitas el empujón pero desde aquí te mando mi energía :)
ResponderEliminarUn beso.
Qué lástima, no pudo ser. Pero lo que nade os robará es el orgullo de ser Demencia. El orgullo de un equipo y de una afición. La ACB no será lo mismo sin el Estudiantes, aunque un año pasa rápido.
ResponderEliminarBesos
Laura, hablaba de baloncesto sobre todo, muchas gracias. Besos!!
ResponderEliminarSese, pues no, no pudo ser. Todavía no me lo creo, pero bueno, así es el juego, ¿no? Tienes razón, queda el orgullo de ser una gran afición. Y el año que viene igual los precios son más asequibles y puedo ir a todos los partidos que quiera, a animar a mis chicos para el ascenso. Beso!